Mira, yo no soy bueno escribiendo ni diciendo cosas bonitas, tú lo sabes. Pero desde que te fuiste no dejo de pensar en todo lo que pasó, y de verdad me pesa en el alma lo que te dije.
No voy a buscar excusas, la verdad es que me pasé. Dije cosas que no debía, te herí, y lo peor es que te fallé cuando más debí cuidarte.